Palabras del Director de USAID El Salvador, Peter Natiello, para el Foro de Donantes

24 de octubre de 2018

Buenos días. Permítanme comenzar con una breve lección de historia.

USAID fue establecida legalmente por John F. Kennedy en noviembre de 1961.

En diciembre de ese mismo año, justo un mes después, USAID firmó un acuerdo bilateral con el Gobierno de El Salvador. Y seguimos operando bajo ese acuerdo.

Esto significa que Estados Unidos ha provisto cooperación para el desarrollo para El Salvador durante cincuenta y siete años.

Hace poco leí sobre la historia de los esfuerzos de USAID en El Salvador y me pareció notable la lista de proyectos que hemos financiado en estos cincuenta y siete años, además de que estos no han cambiado mucho…

Reforma tributaria
Agricultura
Infraestructura
Fortalecimiento de la capacidad institucional
Salud
Educación
Desarrollo municipal y descentralización
Desarrollo juvenil
Y cosas por el estilo…

Como decía, nuestro portafolio actual todavía incluye muchos o la mayoría de estos mismos elementos. Así que en USAID nos preguntamos: ¿qué ha cambiado?

Bueno, ha habido un cambio fundamental. Y lo estoy viendo en este momento, en esta gran sala: tenemos socios, tenemos liderazgo centroamericano.

En la década de los sesenta, USAID estaba relativamente sola. La Alianza para el Progreso del Presidente Kennedy era cosa de los gringos. La inversión extranjera era casi inexistente y se enfocaba totalmente en los productos básicos.

Hoy día, existe la Alianza para la Prosperidad liderada por de los países del Triángulo Norte, es decir, Guatemala, Honduras y El Salvador. Centroamérica esta más conectada con el resto del mundo mediante exportaciones más diversificadas.

La inversión extranjera supera grandemente a la cooperación.

Y hay ya un amplio abanico de socios con los que estamos trabajando para encarar desafíos complejos pero superables.

Veo en este auditorio instituciones locales e internacionales que están realizando grandes esfuerzos para mejorar la seguridad, la prosperidad y la gobernabilidad de la región.

Aquí está Glasswing, una ONG que empezó solo trabajando en El Salvador y ahora tiene presencia en muchos países centroamericanos, con programas que transforman la vida de miles de jóvenes al darles oportunidades para escapar de la violencia.

Aquí veo a FUSADES, que empezó hace más de 30 años como una iniciativa de un grupo de empresarios preocupados por el futuro de El Salvador en la época de la guerra, y que con una donación de USAID, se catapultó a lo que es ahora: uno de los tanques de pensamiento más respetados en América Latina y que trabaja con USAID y muchas otras contrapartes como un socio igualitario en temas de desarrollo.

También está FEPADE, otra ONG local que comenzó por la preocupación del sector privado por la situación de la educación en el país. Hace 30 años, USAID financiaba un gran porcentaje de su portafolio, pero, hoy en día, por cada dólar que USAID aporta para proyectos educativos y de prevención de violencia, FEPADE y socios del sector privado aportan otro dólar.

Qué orgullo tener acá el CEO de MILICOM, el señor Mauricio Ramos. En El Salvador TIGO se ha convertido en un socio fundamental para USAID y otros donantes en temas como educación, conectividad, prevención de violencia y desarrollo de las MYPES. Con ellos tenemos ya varias iniciativas y estamos negociando un convenio de cooperación para la región centroamericana.

MILICOM es solo una de varias empresas con las cuales nos hemos aliado para avanzar una agenda regional de desarrollo y bienestar. Hay más, como Microsoft, CISCO, INDUFOAM, Banco Agrícola, Grupo Poma, Fundación Gloria de Kriete, muchas empresas pequeñas y decenas de universidadas a nivel nacional y regional.

Es gracias a ustedes que, en la actualidad, USAID es un socio minoritario en el desarrollo de Centroamérica, un socio catalizador, un socio estratégico, pero, al fin y al cabo, un socio minoritario.

Estamos aquí para apoyarlos a ustedes en sus esfuerzos para forjar una sociedad más próspera, segura y justa. Son ustedes quienes lideran los cambios que mi Embajadora destacó el lunes en sus palabras de apertura de este foro. Y esos cambios son una prueba concreta de la autosuficiencia que USAID fomenta a nivel mundial.

Colegas, con estas alianzas que hemos forjado y con esta iniciativa que ha empredido la Seattle International Foundation, veo que el escenario ha cambiado y estamos más fortalecidos. Me siento seguro de que juntos podremos abordar los retos complejos que enfrentamos:

– la lucha contra la corrupción
– la lucha contra la violencia
– y el lento crecimiento económico que no permite la creación de empleos dignos para la juventud

El Plan El Salvador Seguro es un ejemplo vivo de cómo estas alianzas generan éxito. Lo estamos logrando poco a poco al trabajar juntos, bajo un plan nacido de un consenso político, con recursos salvadoreños y el compromiso de todos, incluyendo el gobierno central, los gobiernos municipales, las comunidades, la sociedad civil, la iglesia, las universidades, el sector privado y la cooperación internacional.

Construyamos sobre lo construido. Mantengámosnos unidos. Juntos hacemos más. Se puede.

Como dice el Administrador de USAID, Mark Green, si un país está dispuesto a enfrentar decisiones difíciles y superar los obstáculos en el camino a la autosuficiencia, cuenten con nosotros. Vamos a estar a su lado para lograrlo.

¡Gracias! Que tengan un foro muy exitoso.