Palabras del Embajador Ronald Johnson en la entrega de la ayuda de emergencia por la tormenta tropical Amanda
Junio 2, 2020
San Salvador, Instituto Técnico Industrial (ITI)
Los últimos días hemos vivido momentos muy difíciles para todo El Salvador y para los amigos del país. El 31 de mayo de 2020, el gobierno de El Salvador declaró un estado de emergencia nacional debido a la tormenta tropical Amanda.
Más de 1,2 millones de personas se han visto afectadas por la tormenta a causa a los deslizamientos de tierra, inundaciones y daños a viviendas y negocios. Hemos compartido con El Salvador la tristeza y preocupación por todos aquellos que están sufriendo.
Y desde el primer día hemos estado respondiendo a las necesidades de nuestros amigos salvadoreños. Ha sido obvio que los salvadoreños necesitan ayuda inmediatamente.
Desde la mañana del domingo pasado, familias de la Embajada han estado recogiendo personalmente comida, ropa, ropa de cama, agua y otras necesidades para donarlas ese mismo día a los albergues. Me ha motivado ver el deseo de mis colegas y sus familias de hacer algo para el país y sus ciudadanos después de esta calamidad.
Desde que tuve mis primeras conversaciones con el gobierno sobre el impacto de la tormenta, nuestra Embajada, a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, ha trabajado para preparar ayuda, sumando más de $120,000 en suministros y servicios de emergencia para los salvadoreños afectados por esa tormenta tropical.
Hoy donamos kits de higiene, agua, colchonetas, frazadas y otros insumos para atender las necesidades inmediatas. Por su lado, nuestro Departamento de Defensa está consultando con el Gobierno de El Salvador para poder brindar imágenes aéreas que puedan ayudar en sus evaluaciones y respuesta a los estragos causados por la Tormenta Tropical Amanda.
Y es sumamente importante que nuestra ayuda llegue a los lugares donde la tormenta ha tenido mayor impacto, y por eso estamos trabajando con el gobierno nacional, con los alcaldes y gobiernos locales, y con Save the Children, un socio que ha beneficiado a niños y personas necesitadas por décadas.
Los desastres naturales siempre afectan de forma desproporcionada a los más vulnerables de nuestras sociedades, a los habitantes en extrema pobreza. Y si bien no podemos controlarlos, sí podemos unir esfuerzos, entre el gobierno nacional, los gobiernos locales, los socios, la sociedad civil, el sector privado y cada ciudadano, para hacer llegar la ayuda a los lugares y las personas que más la necesitan.
Hemos movilizado estos recursos lo más ágilmente posible porque sabemos que El Salvador también está a la vez luchando contra el coronavirus. Hace unas semanas hicimos una entrega de ventiladores mecánicos para apoyar a El Salvador. En aquel entonces dije que nuestra misión es sencilla: queremos salvar vidas.
Nuestra misión no ha cambiado, continuamos velando por el bienestar del país y de los salvadoreños. Nosotros creemos en El Salvador, creemos en los salvadoreños y creemos en ejercer nuestra amistad a través de hechos y acciones. Continuaremos movilizando fondos de la manera que sea posible para seguir apoyando a El Salvador en estos momentos tan difíciles y para reafirmar nuestro compromiso con todos los salvadoreños.
Quiero tomarme este momento para agradecer la labor tan importante de Protección Civil, del personal médico y todos los cuerpos de socorro que acuden al llamado de los demás. Hay cientos de mujeres y hombres ahora salvando vidas mientras ponen en riesgo la suya. Seguiremos luchando lado a lado con El Salvador, y juntos superaremos también este reto.